Consejos para volver a la rutina de estudio

La organización es la clave

Cuando se trata de volver a la rutina de estudio, la organización es la base. Asegúrate de tener una agenda o planner donde anotes todas tus tareas y compromisos académicos. 

Organizar nuestro tiempo, nuestro escritorio y todo lo que suponga un beneficio para nuestro estudio es crucial si queremos rendir bien tras el reinicio de la actividad.

• Imprime tus calendarios o usa nuestros planners y agendas exclusivas de Apapel
• Asigna un número realista de temas por días y toca más de una asignatura al día
• Ten a mano todo el temario que tienes que estudiar
• Establece horarios, detallando el tiempo de estudio y el tiempo de descanso

Para comenzar, te recomendamos que imprimas tus calendarios o que uses nuestros planners y agendas exclusivas de Apapel. Estos te ayudarán a tener una vista general de todas tus tareas y compromisos académicos, y te permitirán organizar tu tiempo de manera efectiva. También te recomendamos que asignes un número realista de temas a estudiar cada día, y que trates de tocar más de una asignatura al día para tener una visión más amplia de todo lo que tienes que aprender. Es fundamental que tengas a mano todo el temario que tienes que estudiar, para no perder tiempo buscando libros o apuntes.

Además de organizar tus tareas, es importante que establezcas horarios para estudiar y descansar. Trata de ser constante en tus horarios y procura respetarlos lo más posible. Puedes usar una aplicación o un reloj para ayudarte a llevar un control de tu tiempo y aprovecharlo de la mejor manera. No olvides incluir tiempo para descansar y relajarte, ya que es fundamental para mantener tu energía y tu mente en forma. Con una buena planificación y organización, podrás volver a la rutina de estudio de manera mucho más efectiva y tranquila.

Establece horarios

Establecer horarios para estudiar y descansar es clave para volver a la rutina de estudio de manera eficiente y mantener un buen rendimiento académico. Al hacerlo, es muy importante tener en cuenta tus necesidades y preferencias personales, y ajustarlos en consecuencia. Por ejemplo, si eres una persona mañanera, puedes programar tus horas de estudio en las primeras horas del día, mientras que si prefieres trabajar por la noche, puedes dejar las horas de mañana para descansar y relajarte.

Descansa adecuadamente

El descanso es tan importante como el estudio. Asegúrate de dejar el móvil y la tecnología de lado antes de acostarte, y trata de cenar a una hora razonable. También es recomendable organizar todo lo que tienes que hacer el día siguiente, para evitar darle vueltas a las cosas en la cama. Y si puedes, trata de hacer un poco de ejercicio físico durante el día, ya que te ayudará a descansar mejor por la noche y a despertar con más energía. No te olvides de que el descanso es fundamental para poder estudiar de manera eficiente y para mantener tu mente y tu cuerpo en forma.

Trabaja en tu concentración

La concentración es una habilidad clave para poder estudiar de manera eficiente. Trata de acomodar tu espacio de estudio de manera cómoda y agradable, y evita distracciones como el móvil o la televisión. También puedes probar con diferentes métodos de estudio, como el subrayado o la toma de apuntes, para encontrar el que mejor se adapte a tus necesidades.

Sin embargo, puede ser difícil mantener el foco después de un descanso prolongado, como el verano o las vacaciones de navidad. A continuación, te ofrecemos algunos consejos para mejorar tu concentración de cara al inicio de un nuevo cuatrimestre en la universidad:

1. Acomoda tu espacio de estudio de manera cómoda y agradable. Es importante que tengas un lugar adecuado para trabajar, que tenga suficiente luz y que esté libre de distracciones.
2. Evita las distracciones. Coloca tu móvil lejos de ti y trata de evitar cualquier otra tentación que pueda distraerte, como la televisión o las redes sociales.
3. Establece horarios y respétalos. Trata de ser constante en tus horarios y trabaja de manera regular y sistemática. También es importante incluir tiempo para descansar y relajarte.
4. Usa técnicas de estudio efectivas. Hay muchas técnicas diferentes que puedes utilizar para mejorar tu concentración y tu memoria, como el subrayado, la toma de apuntes, la repetición espaciada o el esquema mentales. Es importante que encuentres las que mejor te funcionen.
5. Haz ejercicio regularmente. El ejercicio físico ayuda a mejorar la concentración y la memoria, y también te ayudará a mantenerte en forma física y mental.
6. Descansa adecuadamente. Es importante que tu cuerpo y tu mente descansen lo suficiente para poder estudiar con eficacia. Duerme lo suficiente y evita el estrés innecesario
7. Practica la meditación o yoga. Ambas técnicas son muy eficaces para mejorar la concentración y el control mental. La meditación te ayudará a despejar tu mente de distracciones y a concentrarte en el momento presente, mientras que el yoga te ayudará a mejorar tu equilibrio y tu respiración, lo cual también ayudará a mejorar tu concentración.

1. Haz una lista de tareas y prioriza. Es importante tener una visión general de lo que debes hacer y establecer prioridades, eso te ayudará a enfocarte en lo que es importante y te ayudará a no perder el tiempo en tareas menos importantes.
2. Utiliza técnicas de relajación antes de estudiar. Una mente relajada tendrá una mejor capacidad de concentración, por eso te recomendamos que antes de estudiar te tomes algunos minutos para relajarte y prepararte para el estudio.
3. Utiliza una técnica de Pomodoro. Es una técnica de productividad que consiste en trabajar en periodos de 25 minutos, seguidos de descansos cortos, esto ayuda a mantener la mente enfocada y le permite descansar de manera adecuada, es una excelente técnica para mejorar la concentración.

Con estos consejos, podrásmejorar tu concentración y estudiar de manera efectiva durante el nuevo cuatrimestre en la universidad. Recuerda que la práctica y la perseverancia son clave para mejorar cualquier habilidad, por lo que es importante que seas constante en el proceso y que no te desanimes ante los primeros obstáculos. No te olvides de seguir tus horarios y priorizar tus tareas, establecer tiempo para descansar y relajarte y mantener una rutina de ejercicios y actividades que te ayuden a mejorar tu salud física y mental.

Motívate a ti mismo

La motivación es fundamental para volver a la rutina de estudio. Trata de recordar por qué te esfuerzas tanto y en qué te beneficiará todo este trabajo a largo plazo. También puedes usar técnicas de visualización para ayudarte a mantener el foco y a superar los obstáculos que se presenten.

En resumen, volver a la rutina de estudio requiere organización, horarios bien establecidos, concentración y motivación. Si sigues estos consejos y te aseguras de descansar adecuadamente, podrás afrontar los exámenes del primer cuatrimestre de manera mucho más tranquila y segura. ¡Ánimo y buena suerte!